Un brutal ataque en una canchita de fútbol de Merlo terminó con una patada en la cabeza: “Matalo guacho, ¡que no se meta nadie!”

Un salvaje ataque de una patota a un chico en una canchita de Merlo casi termina en tragedia: Miguel, un adolescente de 16 años fue víctima de una paliza que culminó con una brutal patada en la cabeza que lo dejó inconsciente tirado en el piso.

Un testigo registró el violento ataque en su celular y el video viralizó las redes hizo que la Justicia intervenga actuando de oficio. No hubo denuncia por parte de la familia del menor agredido.

Según se supo, la violenta pelea tuvo lugar en una cancha de baby fútbol ubicada sobre la calle Tonelero al 500, en Mariano Acosta, en Merlo. Detrás de la Ruta 40. Fue el martes por la tarde y tras el incidente, el complejo llamado “El Pola” está siendo investigado por la Policía.

En principio, el incidente se produjo en medio de un partido informal de fútbol, cuando irrumpió una patota de al menos cuatro personas buscando al chico de 16 años.

Por lo que se puede ver en las imágenes, un adolescente ataca a trompadas a Miguel, arengado por otro de los que irrumpieron el partido: “Matalo, guacho ¡que no se meta nadie!”, es la orden de alguien visiblemente mayor.

La violenta pelea a piñas y patadas es de uno contra uno con el resto de la patota interponiéndose con el resto para que nadie interrumpa el ataque.

“El que se mete, le doy un puntazo, un corchazo”, ordena desde un costado el mayor, amagando con sacar un arma de entre sus ropas.

La pelea dura unos segundos, hasta que el chico de 16 años, producto de la andanada de golpes, pierde la estabilidad y cae contra el alambrado, cercano a uno de los arcos.

Con Miguel tirado y casi sin respuestas, aparece otro de los agresores y le pega una brutal patada en la cabeza que deja al chico tirado totalmente inconsciente. El ruido del impacto de la patada en la cabeza es muy duro. Estremece.

“Le dio la patada entre el tabique y el ojo y lo desmayó. Y al que estaba peleando con él le pegó una piña. El chico quedó muy mal. Lo destrozaron”, contó a TN una persona que presenció el ataque en el lugar.

En la nota con el canal de noticias, el testigo detalló: “Se retiraron del lugar amenazando y tienen amenazados a todos los chicos que son menores. Se fueron y ahora la Policía los están buscando”.

Miguel debió ser trasladado de urgencia al Hospital Héroes de Malvinas, ubicado en Merlo. Y, según confirmaron allí, estuvo en observación durante varias horas y ya tuvo el alta médica. Se encuentra fuera de peligro.

Según consta en el informe policial emitido por la Comisaría 6ta de Merlo, luego del incidente los patoteros de retiraron del complejo de canchitas. Hay dos sospechosos identificados: Enzo Sebastián A. (27) y su hermano de 17 años.

La Policía determinó que los agresores ingresaron a la cancha debido a que había un conflicto previo con la víctima. La fiscal Salevsky, de la UFI Nº4, ya solicitó órdenes de allanamiento y de detención de los involucrados en el ataque.